Sanaciones
Masaje Voz Akáshicos Rebirthing
Formas de sentir
La base de las terapias que realizo, proviene de conocimientos desarrollados por la práctica.
Si te dejas llevar por el Corazón, por el Espíritu, ahí esta toda la información.
Sólo confiar.
Doy masajes desde muy pequeña, de forma autodidacta, dejando que me enseñaran las manos y la piel.
La voz también apareció así, un día dando un masaje comencé a cantar y desde entonces, en cada masaje canté. Pues noté, que las manos me dolían si no cantaba.
La energía se movía con el sonido. Era necesaria la voz, los armónicos.
Mi vida ha sido un tratar de acercarme al aire, a ser libre.
En esa búsqueda, comprendí que hay algo más que la libertad, que tener un cuerpo que cuidar, trae unas vivencias.
Y puede ser bello dejarse llevar por esta ilusión, compartirnos l@s un@s con l@ otr@s.
En la columna de al lado, hablo de las dos terapias que han llegado a mí, a través de formaciones.
Mi forma de trabajar, canalizar, es mezclarlo todo! Pues los diferentes portales de luz, se pueden fusionar para crecer. Eso me encanta :)
Hace unos años me invitaron a cantar en un curso de Registros Akáshicos. A cambio, recibiría la formación.
Pasaron cuatro años hasta que usé esa apertura, esa conexión con l@s seres que cuidan el Portal de los Registros Akáshicos.
Fue los primeros días de estar encerrad@s en casa, este 2020. Que comencé a canalizar y canalizar sesiones, que grababa y enviaba por correo electrónico.
Audios llenos de cantos, mensajes y luz.
Y ahora estoy muy agradecida de poder sentir la conexión con este bello Portal de amor.
He sanado muchísimo al canalizar sanación a través de esta terapia. Y me ha ayudado a comprendernos mejor, y parar más y más, el juicio que hay en mí.
Lo último que ha aparecido, este verano pasado del 2020, ha sido el Rebirthing.
Siempre me llamo la atención, desde los 20 años. Y ahora con 33, estoy acompañando, en bellas sesiones, a las personas.
Ver como respiran, como conectan con su esencia, me encanta.
En cada sesión de Rebirthing, se abre mi confianza en que estamos sostenidas por amor, un amor infinito e incondicional. Está ahí, solo hay que relajar y volver al corazón.
Respirar la luz que somos.